viernes, 28 de diciembre de 2018

Ponme un poco aquí y quítame un poco de allá

Poniendo en práctica los consejos de la siguiente entrada vamos a ser los reyes en nuestros círculos familiares y de amigos, y es que saber manejar Photoshop, aunque solo sea a nivel básico, puede servir y mucho para retocar cualquier fotografía que le sobre o falte algo para ser perfecta.

Photoshop es un programa de edición fotográfica con una serie de herramientas que lo hacen un software realmente interesante. Aquí no voy a hacer un tutorial de todo lo que podemos hacer con este fantástico programa, para eso hay centenares de video en Youtube, pero si que resaltaría la importancia de saber utilizarlo. Como podéis ver a continuación, podemos ver qué tal nos quedaría un tatuaje antes de ir a sufrir a nuestro tatuador. Ojalá hubiese tenido mi padre estas facilidades cuando se tatuó su “Amor de madre” en el brazo en su servicio militar.

Por cierto, Photoshop es un programa de pago de la marca Adobe, pero tenemos a nuestra disposición, totalmente gratuito y prácticamente igual de potente, el software libre y gratuito GIMP, así que no hay excusas.

EXTRABALL: Que el alumno se haga una foto y la retoque con Photoshop, introduciendo un texto para que quede de manera que la imagen pueda ser un meme, introduciendo o eliminando algún elemento para poner en práctica lo aprendido.

Redes mortales

En esta entrada no voy a enseñar a nadie a utilizar las redes sociales, porque estoy seguro de que la gran mayoría sabe hacerlo, pero sí que voy a intentar concienciar cuál es la mejor manera de usarlas, evitando aportar datos sensibles que en un momento dado puedan ser utilizados en nuestra contra. Y es que, aunque parezca extraño, hay gente que no tiene otra cosa que hacer que esperar una fisura para atacar. Me refiero al ciberbullying y sus variantes.

Infografía ciberbullying por Emtic educación, tecnología, metodología - CC BY-SA 2.0


Pese a que las redes sociales se inventaron para que hubiese una comunicación constante con amigos y poder compartir con ellos toda la actividad diaria de una persona, tenemos que ser conscientes de que hay información, fotografías y otro tipo de datos y archivos que únicamente deberían ser de dominio personal y no público. 

Además, debemos informar de inmediato al propio entorno web (en la mayoría de las aplicaciones hay una opción de denuncia) de cualquier actividad que parezca sospechosa. Es decir, cualquier persona que intenta intimidarnos o nos amenaza e insulta por la web, se hace pasar por nosotros o difunde material referido a nosotros, verdadero o falso, sin nuestra autorización, puede ser un acosador y hay que frenarlo antes de que la cosa vaya a más. Alguna de las víctimas, que ahora ya no puede contarlo, le hubiese gustado haberlo hecho así a la primera de cambio.

miércoles, 26 de diciembre de 2018

Portafolio digital

Parece que en los últimos tiempos la palabra portafolio se ha puesto de moda, pero hay que tener en cuenta que no es nada más que el “antiguo” currículum, pero de manera extendida, mostrando los logros de la persona que lo ha realizado. Ahora bien, como parece un poco complicado andar de aquí para allá con todos nuestros trabajos, y teniendo en cuenta que contamos con una de las herramientas más poderosas que existen que es la tecnología, ese portafolio va a tener un apellido que va a ser digital.

Crea tu portafolio digital de experiencias por Rebeca Zuñiga - CC BY 2.0


¿Y qué debería incluir ese portafolio? Realmente, todo lo que uno quiera. Todo aquello que demuestre que la persona ha alcanzado una competencia u objetivo. Y como es digital, el formato del archivo es lo que menos importa, llegando a albergar documentos de texto, fotografías, vídeos o páginas web. Todo aquello que tenga el valor suficiente como para demostrar que podemos hacer determinada tarea porque anteriormente ya hemos hecho algo similar, da cierta ventaja frente a cualquier competidor para, por ejemplo, la obtención de un trabajo.

¿Y cómo puede hacerse el portafolio digital? Hay infinidad de herramientas, pero ya que vamos a demostrar lo que sabemos hacer, tiene que hacerse en un entorno vistoso, como por ejemplo en Prezi o en un blog como Blogger o WordPress, teniendo como base de datos cualquier almacenamiento en la nube como Drive o Dropbox.

Compartiendo que es gerundio

En esta entrada voy a mostrar un entorno web que es imprescindible para la vida actual y, sobretodo, para el ámbito académico. Muchos ya la conoceréis, pero no tendría sentido disponer de un blog como este sin nombrar esta herramienta. Se trata de los servicios de Google y más concretamente, los que ofrece con Drive.

Drive es una herramienta online que permite el almacenamiento en la nube de todo tipo de archivos, pero a su vez, y gracias al correo Gmail, permite la creación de documentos y la posibilidad de compartir los mismos. Y no solo eso, ya que permite la edición simultánea de dichos documentos por los integrantes invitados a poder editar. Es decir, para un trabajo grupal de la escuela ya no es necesario quedar en la biblioteca del pueblo o en casa de un amigo, Google nos soluciona el problema logístico.

Descargar documentos por Verbera - CC0 1.0


He hablado de documentos, pero no he dicho cuáles. Pues bueno, hay de todo tipo, desde la típica hoja de Word o Excel, hasta presentaciones Power Point o formularios de Google. ¿Y qué hacemos cuándo hayamos terminado? Pues podemos exportarlo, al formato de origen o a otros formatos o publicarlo en la Web para, posteriormente, incrustarlo en nuestra página web o nuestro blog.

viernes, 7 de diciembre de 2018

¡Y el contenido pa' cuando!

Los juegos son la forma más elevada de investigación
Albert Einstein

Yo no sé vosotros, pero para mí, que una eminencia como fue y es el Sr. Einstein le dé tanta importancia al juego, me hace recapacitar de cómo debería de ser la escuela del siglo XXI. Y no era solo él, personajes históricos como Kant, Nietzsche o Piaget también lo hacían. La respuesta es sencilla y se consigue contestando a la siguiente pregunta: ¿cómo es posible que todavía recuerde cuando jugaba con 8 años al videojuego Final Fantasy VII y no recuerde los contenidos que vi la semana pasada en clase? La emoción, ilusión, motivación, énfasis y un largo etcétera de sentimientos con los que se afronta una situación de aprendizaje, marcarán claramente el devenir de los contenidos en nuestra memoria. ¿O es que no se rememora cierta situación pasada cuando se escucha cierta canción?

En esta entrada voy a hablar de la gamificación, una de las biblias que me acompañará en el camino de la docencia cuando consiga llegar a ser profesor. Como todo tema, este también tiene detractores, pero la mayoría de estos son porque no llegan a entender cómo trasladar los contenidos al juego o porque es mucho más cómodo coger un libro de texto y dar una lección magistral que prepararse una clase de 55 minutos de manera diferente y personalizada. Pero no es mi estilo y en la medida de lo posible, intentaré alimentarme con la satisfacción de ver como un grupo de estudiantes consigue aprender gracias a los retos que se les propone.

Gamificar no significa que el alumno juegue libremente, es dotarlo de recursos y, mediante unas pautas basadas en el juego, consiga alcanzar los elementos del currículo establecidos en su etapa educativa. Por lo tanto, en ningún momento se ignoran los contenidos ni los objetivos, simplemente se muestran de manera diferente para que el aprendizaje sea memorable.

A continuación, muestro un panel Genially titulado “¿Cómo empezar un proyecto gamificado?”, creado por Norberto Cuartero, donde se explican las nociones y elementos básicos para empezar a gamificar en el aula:





EXTRA BALL: Gamificar es innovar, pero siempre se puede aportar más. Tener feedback de las actividades propuestas hará que el profesor continúe innovando, y decirle al alumnado que invente otras, es una forma de explotar cualidades como la imaginación.

miércoles, 5 de diciembre de 2018

¡Me siento seguro!

¿Cerráis con llave vuestra casa cuando os vais de vacaciones? ¿Dejáis a buen recaudo vuestras pertenencias cuando no las lleváis encima? Pues vuestros datos en Internet necesitan los mismos privilegios, y es que cualquiera que quiera haceros daño puede conseguirlo fácilmente si no sois capaces de dotar con cierta seguridad vuestra vida virtual.

Una acción tan sencilla como poner una contraseña diferente a nuestros registros web y que, a su vez, estas contengan diferentes tipos de caracteres como mayúsculas, minúsculas, números y símbolos especiales, tendría que ser suficiente. A menos de que luego la apuntemos en un post-it y lo peguemos en la pantalla del ordenador.

¿Sabéis cómo se codifican los datos? Hay varias formas, pero actualmente, la que más se utiliza, es la criptografía asimétrica, donde cada persona posee una clave pública, para poder encriptar el mensaje, y una clave privada, que lo desencripta, y que son únicas, permitiendo que los mensajes vayan seguros desde el remitente hasta el destinatario, conociéndose entre ellos y sin que nadie pueda entrometerse. Pero como no es plan de ponernos tan serios, voy a enseñaros un algoritmo básico para abrir la mente y que os intereséis por estos temas. Si os digo que 'a' es 'b', 'b' es 'c', 'c' es 'd', y así sucesivamente hasta decir que 'z' es 'a'…

Texto encriptado: RDFTQHCZC



Bueno, si ya habéis descodificado vuestro primer mensaje gracias al código que os he facilitado, vuestro hándicap en hackeo ha disminuido en 0,1. Seguid así hasta llegar a ser unos verdaderos hackers, pero para bien, o lo que es lo mismo, de sombrero blanco.

EXTRA BALL: Se me ocurren tantas ideas innovadoras para aplicar a este tema, pero una vez más voy a decantarme por el juego (mira que me gusta). En cualquier momento en nuestras clases podemos cifrar un mensaje y darle la clave al destinatario para que lo descifre. Quizá de ello dependa salvar al resto del grupo o a la humanidad...

martes, 4 de diciembre de 2018

Ceros y unos

No os asustéis, estas no son las notas que voy a poner cuando sea docente, es el lenguaje que utilizan las computadoras para comunicarse y entender el mundo. ¿A qué resulta extraño que únicamente con dos caracteres un ordenador entienda la complejidad de nuestro mundo? Esto es debido a la gran capacidad computacional que poseen.


En esta entrada voy a hacer una breve explicación para entender ese mundo, ya que con unas simples operaciones podemos pasar nuestro nombre de binario a decimal y viceversa y que la gente piense que estamos locos. Empezamos diciendo que cada 0 y 1 es un bit y que la combinación de estos bits y la decodificación del código binario da como resultado un número decimal y que ese número, a su vez, pertenece a un carácter de la tabla ASCII. Para ello, y contando de derecha a izquierda, veremos en que posición se encuentran los unos siendo la primera posición 0 -> 2= 1. Después, se realiza una suma de doses elevados a cada número obtenido de esas posiciones. Es decir, del código binario de 6 bits 100100 da como resultado la suma de 22 y 26, que es 36 y si buscamos ese número en la tabla ASCII vemos que corresponde al símbolo $.

Hasta el número 31 son caracteres de control, del 32 al 127, caracteres imprimibles más usados y de ahí al 255 están los caracteres más extraños como letras acentuadas o con diéresis. A continuación, os pongo la tabla que contiene los símbolos más utilizados, que para empezar está muy bien.


Ahora vamos a pasar el nombre de Jorge a binario, utilizando 8 bits por letra
J = 74                    o = 111                 r = 114                  g = 103                  e = 101
01001010             01101111             01110010             01100111             01100101

Un pequeño truco: la secuencia binaria resultante de un número par siempre acaba en 0 y la de un número impar siempre acaba en 1. Ánimo, que ya estamos más cerca de pensar como nuestro ordenador.

EXTRA BALL: Hay infinidad de actividades innovadoras que hacer con nuestros alumnos referentes al código binario. Una de ellas, haciendo uso de la gamificación, que un grupo deje una pista en binario y otro la resuelva calculándola a decimal y pasándola a caracteres de la tabla ASCII.